Uno de los hechos preocupantes de esta semana es, sin dudas, el masivo despido de periodistas y trabajadores/as de prensa de distintos medios, que en un sólo día llegó a 95.

Estos despidos se dan en el contexto de crisis sanitaria donde miles de compatriotas están sin empleos y muchos otros están retornando al país tras haber perdido su puesto de trabajo.

Por ello, el pasado martes, el Sindicato de Periodistas del Paraguay SPP, organización miembro de la CODEHUPY, se manifestó en repudio de los despidos, con el apoyo de individualidades y organizaciones fraternas, entre ellas el Equipo Jurídico de CODEHUPY.

Oscar Ayala Amarilla, Secretario Ejecutivo de CODEHUPY manifestó que “los despidos masivos son el resultado de la falta de protección estatal de los trabajadores, situación agravada en un contexto donde el gobierno ha renunciado a adoptar medidas garantistas que impidan los despidos y proteja el empleo, como sería propio de un Estado social de derecho, tal como lo señala nuestra Constitución. Esta circunstancia ha dejado a los trabajadores al arbitrio de sus empleadores, en plena crisis económica y pandemia, lo que demuestra, también, la pertinencia de seguir exigiendo la creación y desarrollo integral de un sistema de protección social que ubique en el centro de las políticas públicas a las personas, para que éstas no se vean tan dramáticamente afectadas como lo están siendo ahora en esta crisis económica derivada de la pandemia.”

Asimismo, Jimmy Peralta, secretario ejecutivo del Sindicato de Periodistas SPP, en entrevista para CODEHUPY, dijo que, en los últimos días se registraron 100 despidos de periodistas dependientes de grandes empresas y en las semanas anteriores en las ciudades del interior, fueron desvinculadas las corresponsalías, también los trabajadores de medios pequeños que son cuentapropistas ven inviable hacer periodismo en este momento.

También, Santiago Ortiz, Secretario General Adjunto, manifestó que existen entre 200 y 250 suspensiones, sin embargo, los despidos son los más preocupantes, porque si bien la legislación laboral habla de la posibilidad de despidos, cuando se dan situaciones drásticas como la actual, se debe dar participación al trabajador, trabajadora y a las autoridades administrativas del trabajo, es decir, al Ministerio de Trabajo, como lo establece la OIT. El Sindicato considera estos despidos como un ataque a trabajadores/as y a la libertad de expresión, porque reduce el acceso de la gente a información.

“Las empresas no tienen sustento para alegar que esto se debe a la crisis que estamos viviendo actualmente, ya que los medios no se vieron afectados por el cese de actividades, se trabajó más de lo normal, se consumió más información que siempre, no tuvieron que parar de producir, nadie tiene registro de merma importante en los ingresos por publicidad, principal sustento económico de las empresas de comunicación. Por lo que creen que están aprovechando la cuarentena para tomar esta medida, evitar la reacción de las y los trabajadores y poder llevar adelante una política de ajuste planificada con anterioridad, garantizando sus ganancias, pero sobrecargado de tareas a quienes quedaron”, expresó Ortiz.

El Estado abandonó su función de garante, dejando al libre arbitrio de las patronales a trabajadores, lo que genera una enorme crisis, por esto el SPP acudió al Ejecutivo y al Parlamento para habilitar un espacio de diálogo a fin de generar un pacto social, también presentó un Proyecto de Ley, junto a otros gremios, que propone cero despidos, creación de un fondo para pequeñas y medianas empresas que necesiten apoyo estatal para pagar salarios y prevé el reconocimiento inmediato de sindicatos, que funcionen como contralores para el cumplimiento de la Ley y el establecimiento de un verdadero diálogo social.

Es fundamental que se garantice el sostenimiento de los puestos de trabajo para evitar que la crisis se convierta en una tragedia social donde haya miles de compatriotas sin empleo y una imposibilidad absoluta de reactivar la economía porque el trabajador no va a tener forma de consumir y por ende el aparato productivo va a quedar totalmente paralizado.