Este aniversario del día internacional de los Derechos Humanos nos encuentra a todas las organizaciones de la sociedad civil en un momento particular marcado por el avance de las medidas antidemocráticas y de marcado sesgo autoritario. Esto se expresa en el paquete de leyes impulsadas por el gobierno del Presidente Santiago Peña, que tiene como orientación la pérdida de derechos y garantías para las organizaciones sociales en particular y para la población en general.

El peligro que nos acecha pone en perspectiva un régimen político autoritario para regimentar la vida social con mayor dureza y socavar los derechos más elementales de las personas y las organizaciones, moldeando un Estado al servicio de los sectores económicos ligados al cartismo, profundizando las injusticias en todos los sectores de la sociedad.

La lucha por la materialización efectiva de los DDHH se constituye en la columna vertebral del que se desprenden los principales ejes democráticos por los que debemos seguir luchando para defender los derechos conquistados por el pueblo, y avanzar hacia la conquista de la Justicia Social.

En ese sentido, la lucha por la reforma agraria, el derecho a la vivienda, un sistema de salud y educación gratuito y de calidad, el derecho a la educación sexual integral, el respeto y no discriminación a la comunidad LGBTIQ+, el avance hacia el reconocimiento de los derechos de las mujeres y una vida libre de violencia, el derecho de la niñez a una vida libre de violencia, el derecho a la seguridad social digna y efectiva para toda la población, el cumplimiento y ampliación de los derechos laborales, la participación efectiva y protagónica de la sociedad civil en las decisiones políticas más allá del ritual electoral, el derecho a la manifestación, entre otros, deben ser las principales banderas bajo las cuales debemos salir a exigir a Estado el efectivo cumplimiento de cada una de estas reivindicaciones.

El oficialismo vive de espaldas a la realidad cotidiana de cientos de miles que viven en condiciones de vulnerabilidad inhumana, mientras ellos forman parte de los grandes negociados, trafican con sus influencias para corromper el sistema de justicia, colocan a sus parientes en la función pública, y como si todo ello fuera poco, se aumentan sus dietas de manera grosera demostrando una insensibilidad inaudita ante los graves problemas sociales que se profundizan.

La comprensión profunda del momento político que atravesamos implica la disposición de todas las organizaciones sociales y populares, más allá de las diferencias, para articular la resistencia ante el cartismo que es la expresión política del avasallamiento de derechos e intento de implantación de un régimen político autoritario que nos afecta a todos y todas. Es por ello que la lucha por la vigencia de los DDHH se torna fundamental para recuperar garantías y derechos arrebatados, poner freno a esta embestida autoritaria y avanzar en conquistas necesarias para una vida digna.

Este 10 de diciembre invitamos a la ciudadanía a salir a las calles firmes y decididos a denunciar toda la política que viene implementando históricamente la ANR y el cartismo en particular y poner en perspectiva la unidad de acción entre los más diversos sectores para luchar por la vigencia de los Derechos Humanos.  

Itinerario de la Marcha

Asunción, diciembre 9 de 2024

Para más información contactar con:

María Stela Silva Invernizzi: +595 982 173805

Eduardo Aguayo: +595 991 686846

Dante Leguizamón: +595 981 555430

Marcial Gómez: +595 985 316913